lunes, 2 de mayo de 2011

Mi primera tirada




Es bueno y agradable recordar, sobre todo, todo aquello que nos ocurre y nos marca de forma positiva. Recuerdo "mi primera lectura del tarot". Llevaba unos días leyendo un libro pequeño que había encontrado junto a las cartas del tarot en casa de la pareja de mi madre. Las explicaciones me parecían extensas y no me animaban mucho a seguir, ciertamente se me hacía un poco denso. Y muchas veces me desesperé un poco. Prefería pensar que era un libro para personas con muchos más conocimientos que los míos, personas con cierta experiencia y no para principiante como yo y así apaciguar mi frustración. La verdad que después de cerrar varias veces el libro sin entender demasiado, decidí aprovechar mi primera oportunidad de leer las cartas. Sin haber llegado ni a la mitad del libro y sin tener ninguna experiencia en el tema, me ofrecí de intrépida. Sentía un impulso natural de interpretar las cartas, así que aproveché a mi primer consultante, tampoco me confié ni relajé, pero me permití ciertos aportes. Y supongo que fui inmadura o no, ya eso no lo sé, espero que alguien pueda decirme algún día. Porque desde luego no seguí ninguna de las normas del tarot (las cartas eran usadas, no sabía ningún tipo de tirada de cartas ni siquiera sabía la interpretación de cada una de las cartas...actué por total y completa intuición y con un respeto infinito eso sí). Preparé la mesa, me vestí cómodamente, me relajé al máximo e invoqué al Universo y a todo lo que me pareció, con total y absoluto respeto y humildad comencé a barajar las cartas y a ponerlas sobre la mesa. Evidentemente, no estaba preparada, pero mi impulso me decía que debía hacerlo. Repartí las cartas y guiándome por las definiciones del libro fui interpretando poco a poco, hasta que cerré nuevamente el libro y pude decirle muchas cosas a mi familiar, que ante mis ojos asentía con la cabeza y quedó tan atónito, como yo. Entonces, salí con la total convicción que algo existía porque la seguridad con la que había hablado y dicho ciertas cosas que no sabía no podía ser una simple coincidencia. Me di total cuenta que sólo me habían dejado ver un trocito ínfimo de la película y que si la quería ver completa, tenía que prepararme, leer, informarme, pero sobre todo sentir lo que hacía. La sensación que más recuerdo porque es la que aún hoy me visita cada vez que consulto: fue como si en tu mente aparecieran de golpe pasajes que debes explicarlos con palabras (no digo que vea espíritus porque no es cierto, al menos no en mi caso, cada persona tiene su propia manera de sentir la información que te llega), pero sólo se mete como un pensamiento intermitente que solo desaparece a la vez que lo dices, en imágenes o hasta en una voz interior. El conocimiento sólo no lo es todo como tampoco lo es todo el don o la gracia que pueda tener una persona, hay que unir ambas cosas. Y eso es un camino largo, en el que cada día se aprende y un camino muy gratificante porque el poder ayudar a otras personas es algo que me hace sentir muy bien. Aunque tampoco quiero decir que todo sea color de rosas porque no solamente damos buenas noticias y hay que estar preparado para poder ayudar, pues en muchísimas ocasiones la ayuda psicológica es mas importante que cualquier otra y el intérprete ha de ser una persona que escuche, que transmita confianza y pueda tranquilizar y nunca alterar al consultante.

4 comentarios:

M. esther Madriz dijo...

Querida Doris
Me ha gustado mucho tu relato.
En la actualidad no explico a casi nadie las cosas que por… no se porque, puedo ver, pero que desde muy pequeña han estado allí. Recuerdo cuando era mucho mas joven, “jugué” un poco con esta capacidad ( cosa que no recomiendo a nadie). En fiestas y reuniones solía terminar rodeada de gente dispuesta a que le leyera la mano, el tabaco, los ojos…. En esa época era para mi un juego, hasta que comenzaron a ocurrir cosas no tan divertidas como VER cosas realmente reveladoras e importantes en la vida de aquellas personas. Eso me hizo frenar, por respeto, por humildad y por darme cuenta que aquel mundo que tanto me divertía era mas serio de lo que yo pensaba. Deje de jugar…. Nunca mas volví a hacerlo, seguí y sigo mi vida pero aun suelo ver con nitidez muchas cosas en las personas con las que me encuentro, y es así como dices tu…. Es como un flash que de pronto viene a mi mente, paisajes, situaciones, colores, olores, sensaciones fuertes…
Deje de “jugar” con estas energías sutiles por varias razones, una de ellas es como dije antes, por respeto y la otra es porque siempre mi ser ha estado dividido entre el alma ( la espiritualidad) y la razón ( la ciencia). Y para este ultimo factor, con el descubrimiento de la “ciencia quántica” están ocurriendo cosas fantásticas! Resulta que, POR FIN!!, la ciencia se esta uniendo poco a poco con las energías sutiles, es decir, con el alma, la espiritualidad… y en fin, con todo aquello que no tiene explicación ninguna.
Este verano tuve la oportunidad de leer un libro que recomiendo ampliamente, se titula “ ¿Somos Inmortales? , La vida después de la muerte” de Steven Peake. Es el primer libro que me he leído que explica la quántica de manera, digamos… mas entendible y aseguro que este nuevo mundo de la ciencia nos puede dar una explicación a todo aquello que ya muchos de nosotros dábamos por entendido por el simple hecho de SENTIRLO!
Un beso muy fuerte Doris! Me encanta esta pagina!!! Gracias por compartir de manera tan limpia y pura y desinteresadamente tu DON. Gracias por estar allí, y gracias por estar cerca de mi!
M. Esther

Doris dijo...

Hola chamita, unos toques mágicos y resuelto el problema de la tecnología ;). Me ha dado inmensa alegría tu comentario y agradezco muchísimo que compartas conmigo tus experiencias. Leeré ese libro del que hablas, me gusta leer de esos temas. Es un lujo que estés aquí y soy yo la agradecida. Gracias a ti por ser una bella persona y por tu confianza. Te dejo un abrazo muy fuerte!!!

Fernando dijo...

balla, esto esta muy interesante, gracias por publicarlo. yo soy tambien soy principiante del y estoy emocionado porqu acabo de hacer mi primera lectura oficial. tambien me paso lo mismoque a usted, aveces me siento un poquito unconforme porque siento que necesito mas perfeccion, me quede pensando mucho en un tirada y como que aveces me bloqueo y no sabia que decir pero luego logre decifrar que era. siempre llega la respuesta aunque un poquito tarde. me paso lo mismo con mi mama y mi hermana. pero aun asi la persona quedo satisfecha y me dijo que todo salio como era y que nada fallo. :) pero me calmo con pensar que es cuestion de interpretar lo que dicen las cartas y no inventarse nada. y estoy feliz cada vez desarrollandome mas en esto.

Doris dijo...

emenemeHola Fernando
Muchas gracias por tu comentario. Es normal que al principio uno se sienta con cierta inseguridad, pero eso va pasando a medida que vayamos conociendo y dominando el verdadero significado de las cartas del tarot, por eso lo mejor es no sentirse nunca presionado, es importante que la interpretación de las cartas fluya de manera natural y nunca de manera forzada. Es bueno relajarse unos instantes antes de la tirada, conversar con el consultante. Poco a poco irás encontrando tu propio mecanismo para relajarte y concentrarte, así como dicen que cada maestro tiene su librito, pues cada tarotista tiene su gracia, lo más importante es trabajar con humildad y respeto hacia las personas. No te sientas inconforme, no siempre estamos sensibles y perceptivos, lo mejor como te digo es no forzarse a uno mismo y menos improvisar ni inventar cosas. Y ya ves, por lo que dices las personas quedaron satisfechas, ese es el mejor comienzo. Tus consultantes serán la mejor prueba de tu valía. Muchísima suerte y no dejes de leer y aprender.